Todos los programadores, utilizan lo que en la jerga informática se llama puertas traseras, que son pequeños ajustes que están disponibles o formas de entrar al sistema cuando no es posible (o hacerlo incluso remotamente) y que no son de conocimiento habitual por parte del vulgo, por decirlo de alguna forma. Aunque esta funcionalidad quizás no sería para llamarla así; sí que es una utilidad que permite hacer ciertos ajustes.
Ya hace meses que esto es conocido, pero como hay mucha gente aún no sabe de ello, me pareció bien hacer un artículo sobre el mismo. El modo Dios es un modo especial que está ya presente desde Windows Vista a Windows 8 (aunque no en todas las versiones y actualizaciones), y como no puede ser de otra forma por Windows 10.
Es un modo de acceso un tanto especial que permite hacer cambios más “finos” en nuestro sistema y tenerlos disponibles desde el escritorio, con lo que podremos ajustar Windows a nuestras necesidades.
Activarlo es realmente sencillo, primero creamos una carpeta nueva en el escritorio, de la misma forma que hacemos siempre (con el botón derecho del ratón sobre el fondo del papel tapiz en una zona donde no haya nada, elegimos NUEVO y CARPETA), pero con la salvedad que al aplicar el nombre añadimos lo siguiente: Modo Dios.{ED7BA470-8E54-465E-825C-99712043E01C} .
Importantísimo que le añadamos este nombre, pues con ello el sistema “sabe” que queremos acceder a estos ajustes, que de otra manera no tendríamos acceso a ellos.
Una vez echo, tendremos un icono de color azul, similar al del PANEL DE CONTROL y en el que aparece el nombre “modo Dios”, tras él se esconden todos los ajustes que podamos realizar, bastará con que hagamos doble clic sobre él y tendremos acceso a todos los ajustes.
Espero que os sea de mucha utilidad.
Cristóbal Aguilar.
Sobre el autor